Una mañana entretenida en una zona con un encanto grandisimo.
Cada vez que salimos encontramos algo difente aunque a primera vista parezca igual. Unas tierras aridas que van cambiando de color a medida que la carretera va paralela al rio Andarax.
El verde y la vegetacion va en aumento a medida que vamos avanzando. Tierras muy bien trabajadas para el cultivo de frutales y muchos almendros, que nos hacen olvidar el bullicio del turismo de playa, por la paz y la tranquilidad de estos bonitos pueblos que vamos encontrando.
Visitamos la zona arqueologica de Los Millares, un lugar con muchisisma Historia que vale la pena pisar, lastima que necesitas practicamente la mañana para tener la maxima informacion, mas adelante volveremos, ya que el cierran a las dos de la tarde y no tenemos mas tiempo.
Y el lugar elegido para comer este mediodia, ha sido en el pueblo de Padules, donde seguimos triunfando en el tema del buen comer y una mejor si cabe, amabilidad por parte de sus gentes. Un ajo blanco fresquito y cordero a la brasa de la tierra ha sido un menu magnifico.
Todo igual hasta llegar a Berja, donde empiezan a despuntar ese mar de plasticos que nos meten de lleno en El Ejido y estamos hartos de ver, por lo que ponemos pies en polvorosa por medio de la autovia hasta llegar al apartamento.
La proxima salida queremos hacerla a las Alpujarras y seguir descubriendo esos encantos que tienen.